El 'Ghosting' como forma de 'acabar' con las relaciones sentimentales en tiempos modernos

“Escribimos para saborear la vida dos veces: en el momento y en retrospectiva.”
– Anaïs Nin
Es a cada vez más frecuente el escuchar anécdotas al respecto de lo que ya muchos hemos vivido: he conocido a alguien, hemos intercambiado números de teléfono, tuvimos varias citas, hubo coito, ’empezamos’ una relación, todo parecía ir de la mejor manera y de repente… silencio. Vacío y nada más.

Este es el modus operandi del cómo hoy muchos deciden ‘acabar’ con una relación. Lo hacen sin previo aviso; esa misma persona que después de flores y atenciones deja de contestar tus mensajes de texto y tus llamadas. Te elimina o te deja de seguir en tus redes sociales. Simplemente, decide desaparecer de tu vida sin dar ningún tipo de explicación. Sin ‘ningún motivo’ aparente. 

Si tú también ya haces parte de este selecto grupo de ‘víctimas’, entonces has vivido algo parecido a lo que en inglés llaman ghosting, palabra que se traduce cotidianamente, como “hacerse el fantasma” y que ha ido ganando popularidad en los últimos tiempos. En especial para describir rupturas sentimentales o para personas que van y vuelven de la nada. 
 
Foto de edición propia.

El “ghosting” es un término acuñado en el año 2015 y popularizado a raíz de un artículo que pronto se volvió viral del New York Times titulado: Exes Explain Ghosting, the Ultimate Silent Treatment, en el cual se relataba el caso una supuesta ruptura. Esta práctica social que se comienza a ‘arraigar’ en la cultura digital de hoy, surge en opinión para el psicólogo Miguel Hierro, 

Porque es más cómodo no enfrentarse a situaciones de alto impacto emocional como tener que decir ‘no quiero seguir viéndote. […] De modo que, resulta ser una comodidad propia de cómo empiezan hoy en día las relaciones en las aplicaciones de móvil y/o redes sociales, donde el nivel de responsabilidad es menor.

Por ello, no nos debería asombrar que, resultase coherente y sensato creer que la rapidez de empezar una relación por redes afecta también a la rapidez para dejarlo. Si bien para autores como Bauman, en estos tiempos de ‘relaciones líquidas’, el papel que cumplen nuestros modos de concebir una relación en las redes sociales actuales se debe esencialmente a que, 

En una red, conectarse y desconectarse son elecciones igualmente legítimas, gozan del mismo estatus y de igual importancia (2005, p. 05).

Atendiendo al contexto, el ‘ghosting’ ha de ser el resultado de la inmediatez, de la globalización, influenciado en gran medida, por la utilidad del anonimato que las redes sociales brindan también. El hecho de que las vías de comunicación sean tantas ha facilitado que la ‘ausencia’ pueda ser más fácil de lograr y menos ‘riesgosa’ de vivir, evidentemente. Pues, desde la distancia todo mundo es ‘valiente’, y en este modo de hacerse el fantasma, se hace más patente. Pero ¿por qué ocurre esto? ¿Qué posibles factores o variables son las que llevan a alguien a desaparecer en lugar de comunicar la ruptura a la otra parte?


Al respecto, la profesora de sociología del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) Sherry Turkler explicaba al ‘Huffington Post’ que, esto es un fenómenos  “algo casi único del mundo ‘online’ ”. Pues, la docente afirma que, “con las nuevas tecnologías nos hemos acostumbrado a deshacernos de la gente simplemente no respondiendo”. Evitar la confrontación, el principal argumento de este ‘beneficio’.Ante lo cual surge la cuestión, ¿Quiénes son en esencia los que más acuden a aplicar esta ‘estrategia’?

Según la experta son, 

Los adolescentes, que crecen con la idea de que es posible que le envíen un mensaje de texto y no reciban respuesta. Porque, cuando nos tratan como si pudiéramos ser ignorados, empezamos a pensar que eso está bien y nos tratamos a nosotros mismos como personas que no deben tener sentimientos. por lo que empieza a desaparecer la empatía.

Intentando comprender el por qué del ‘ghosting’ la psicóloga Maya Borgueta, de la organización californiana Lantern, explica que, 

El ‘ghosting’ está relacionado con el querer evitar el conflicto. De esta manera, ser víctima de ello, puede reforzar las inseguridades que uno tiene y afectar a sus relaciones futuras”.

De allí la importancia de entender estas practicas sociales que se están volviendo tan comunes hoy. Es cuestión de preocuparse por nuestra salud mental, para que así, de a poco podamos ‘blindarnos’ mejor contra estos modos de ser, hacer, aparecer y desaparecer. Además, como dice la psicóloga Borgueta, 

Esto también puede tener efectos psicológicos negativos en la persona que lo practica, que puede desarrollar un gran sentimiento de culpa y vergüenza, sintiendo que no es capaz de manejar los momentos difíciles de una relación.

Sin embargo, las malas ‘nuevas’ no paran. Dado que, existe otro tipo de ‘ghosting’ incluso más molesto. Ese que se va, pero no desaparece. Esto se presenta cuando alguien desaparece y sigue mandándote mensajes, es como un muerto que sigue volviendo a la vida. Pues, no te permite atravesar todas las etapas del duelo y acabar con el asunto. De modo que, se debe actuar de manera contundente si querés tener esa anhelada paz mental.

Hacerlo visible para nosotros, es el primer paso para poder hacerlo comprensible. Si queremos apelar al cuidado de la salud mental; debemos comenzar a preguntarnos cómo mejorar nuestra concepción de nuestras relaciones interpersonales. En especial, en el término sentimental. Al tiempo que, debemos a ‘inculcar’ a los que vienen de cómo evitar concebir nuestras relaciones sentimentales de este modo como lo es el ‘ghosting’. Se trata es de humanizarlas —a nuestras relaciones sentimentales— y enriquecerlas en lugar de ‘deshumanizarlas’. Esa debería ser la enseñanza y el compromiso al mismo tiempo.  
Camina hacia el futuro

Yeisson X

Médico especializado en Neurología. Abogado con énfasis en Derecho Penal. Bueno, todo eso querían en mi familia. Estudié Comunicación Social – Periodismo, escritor y buen amante.